El tratamiento del silencio es una táctica psicológica en la que una persona niega la existencia de otra al dejar de responder a todo lo que dice o hace. Aunque la otra persona envíe mensajes, intente conversar o quiera reunirse para resolver un problema, se le ignora por completo, incluso se le aísla y se le rechaza.
Contrario a la necesidad social humana de conexión, el tratamiento del silencio deja en la víctima un profundo daño psicológico. Esta «táctica del silencio tóxico» existe en diferentes formas, desde las más severas hasta las más sutiles:
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Ignorar completamente los mensajes en redes sociales.
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Retirarse repentinamente de una discusión (sin previo aviso).
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Evitar responder preguntas orientadas a la solución, como «¿podemos reunirnos para hablar?».
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Negarse a reunirse en persona.
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Guardar silencio solo con una persona en particular, mientras se interactúa normalmente con los demás para mostrar discriminación.
Descripción de las formas de tratamiento del silencio en la vida cotidiana.
El tratamiento del silencio aparece en más lugares de lo que se piensa, desde situaciones graves hasta pequeños detalles:
En la familia, los padres ignoran a sus hijos cuando estos intentan confesarles algo, especialmente temas delicados como el amor o la salud mental.
En el trabajo, los colegas ignoran tus ideas durante una presentación o en el trabajo en equipo, «haciéndose los que han visto» sin escuchar realmente.
En el amor, tu pareja ignora constantemente tus intentos de resolver un conflicto, como si no entendiera lo que dices.
El silencio a veces puede ser más dañino que una fuerte discusión. ¿Cuáles son las consecuencias del tratamiento del silencio para la víctima?
En primer lugar, daña la autoestima. Los psicólogos califican esta táctica como un comportamiento «intencionalmente doloroso». El instinto de supervivencia humano necesita la interacción social para ser consciente de su existencia dentro de un grupo.
El silencio, por lo tanto, se convierte en un cuchillo que corta todos los lazos, haciendo que la persona se sienta «no reconocida» y que su existencia carezca de sentido. La psicología compara este comportamiento con «agitar un hueso frente a un perro y luego retirarlo sin dejar que lo tome», lo que lleva a la víctima a un pozo de frustración.
En segundo lugar, manipula psicológicamente. La persona silenciada se llena de autodesprecio, deseando cambiar la situación, y puede llegar a ceder e incluso perder su propia identidad.
Las consecuencias del tratamiento del silencio son la manipulación y el daño psicológico a la otra persona.
Aunque se considera una agresión pasiva, la persona que elige el silencio… no siempre lo hace con mala intención. La mayoría no comprende el impacto del tratamiento del silencio en la otra persona. A continuación, se presentan 3 razones comunes por las que las personas recurren al tratamiento del silencio, según PsychCentral.
¿Por qué las Personas Eligen el Silencio en Lugar de Resolver el Problema?
Silencio para protegerse del daño
Las personas que guardan silencio durante una discusión acalorada no necesariamente lo hacen porque te odien o quieran atacarte.
Según la Dra. en Psicología Kristin Davin, el perpetrador a veces también es víctima de un trauma. Temen la confrontación y ven el silencio como un escudo protector para salvaguardar sus propias emociones. Elegir el silencio les ayuda a alejarse temporalmente de cualquier batalla que anticipan como dolorosa.
Ante esta situación, es importante comprender que la otra persona puede no estar intentando agredirte intencionalmente.
Silencio por… problemas de comunicación
No todos saben cómo manejar los conflictos con destreza. Las personas que recurren al silencio a menudo tienen problemas para controlar y expresar sus propias emociones, lo que les dificulta leer las emociones de los demás.
Aunque el silencio no es la mejor opción, es la… más fácil para evitar pensar. También se considera un «mecanismo de afrontamiento», la forma en que lidian con las señales de estrés.
Un grupo de introvertidos puede darte esta sensación de silencio, y a menudo, si conoces la causa, ya no lo percibirás como «tóxico».
Silencio para «vengarse» deliberadamente de la otra persona
Según el periódico Atlantic, las personas pasivas guardan silencio para evitar el conflicto (como en las dos razones anteriores), pero las personas con personalidades fuertes lo hacen deliberadamente para manipular las emociones y castigar a los demás.
¿Por qué es un castigo?
La naturaleza humana es social y necesita conexión. Si una interacción familiar se interrumpe, nos sentimos impulsados a repararla. En este proceso, la víctima del tratamiento del silencio puede disculparse incluso si no ha hecho nada malo, para salvar la situación.
Las investigaciones también indican que el tratamiento del silencio es como un dolor físico. Activa la corteza cingulada anterior del cerebro, la misma área que procesa el dolor cuando se sufre una agresión física. En este caso, el tratamiento del silencio se considera una forma de abuso emocional tóxico.
Sin embargo, ¿sabes qué es lo interesante de todo esto?
En Realidad, el «Autor Intelectual» del Silencio Tóxico También se Está Dañando a Sí Mismo
El periódico Atlantic explica que el instinto humano está programado para responder a las «señales» sociales. Si alguien nos pregunta, respondemos; si hay un problema, queremos resolverlo.
Ignorar a alguien nos obliga a «recordarnos» constantemente por qué lo estamos ignorando. ¿Porque nos causó dolor? ¿Porque queremos hacerle daño? El resultado es que seguimos viviendo rodeados de energía negativa, ira y odio.
Persona reflexionando sobre el tratamiento del silencio La persona que aplica el silencio también sufre.
La persona que aplica el silencio tóxico tampoco es feliz, especialmente en una relación sentimental donde todavía siente un gran interés por la otra persona. Debe esforzarse por convencerse de lo contrario, y esto también va en contra de su instinto natural. ¿Cómo podemos poner fin al silencio para ambos?
¿Cómo Debemos Enfrentar el Tratamiento del Silencio Tóxico?
Lo primero que debes hacer es calmarte, respirar profundamente y dejar de buscar respuestas. En lugar de eso:
Comprender la causa del silencio
Puede que sea una persona pasivo-agresiva que guarda silencio para evitar decir algo hiriente, o simplemente un introvertido que considera el silencio como una forma pacífica de resolver las cosas.
Hay muchas razones detrás del tratamiento del silencio, como se mencionó anteriormente. Y la mayoría de las veces, el problema no proviene de ti, sino de la otra persona. Dale tiempo para estar consigo misma.
Ser objetivo
No todos tienen el mismo «cerebro» que nosotros. Cuando no se habla el mismo idioma, es mejor sentarse y comunicarse cara a cara, en lugar de enviar mensajes de texto.
No pensar que todos te están… atacando
«No te lo tomes como algo personal», la gente no te está «apuntando con el dedo» tanto como crees.
Una persona puede tener miles de razones para guardar silencio. A veces, son razones… absurdas, como quedarse dormido y olvidarse de responder un mensaje al día siguiente. Otros pueden guardar silencio porque están pasando por un momento difícil, como un cambio de trabajo, desempleo, problemas familiares o personales. Esta perspectiva te ayuda a ser más abierto y tolerante en tus relaciones, especialmente cuando todos están lidiando con sus propios problemas.
Compartir honestamente «lo que estás pensando»
La persona que inicia el silencio a veces no es consciente de la gravedad del tratamiento del silencio en la relación. Puedes cambiar eso mediante una comunicación positiva entre ambos.
Si logran reunirse después de una discusión, puedes expresar sinceramente tus sentimientos a la otra persona. Y viceversa. Podrías descubrir otros aspectos emocionales de la otra persona, ocultos tras la máscara del tratamiento del silencio.
Alejarte cuando sea posible
Amar a una persona que constantemente guarda silencio cuando surgen problemas puede tener consecuencias negativas para tu salud mental a largo plazo. Tú mismo lo sientes.
Terminar una relación donde el tratamiento del silencio es recurrente también es una forma de establecer límites saludables para ti mismo.
Las reacciones de dolor ante el tratamiento del silencio son parte del instinto humano. Al comprender el origen y las razones de este comportamiento, puedes aprender a regular tus emociones y acciones de manera adecuada para evitar el daño en cualquier situación.
