ISO (Organización Internacional de Normalización) es la mayor organización no gubernamental (ONG) del mundo dedicada al desarrollo de normas internacionales voluntarias. Fundada en 1947 en Ginebra, Suiza, su nombre proviene del griego ‘isos’, que significa igual.
Aunque existen siglas diferentes según el idioma, se optó por ISO para asegurar una abreviatura universal. La ISO opera a través de miembros expertos de todo el mundo que comparten conocimiento y desarrollan estándares basados en el consenso, adaptándose al mercado para impulsar la innovación y ofrecer soluciones a desafíos globales. Su labor principal es desarrollar y publicar normas internacionales que faciliten la compatibilidad de productos, mejoren la seguridad y promuevan el intercambio de buenas prácticas.
La ISO cuenta con tres tipos de miembros:
- Miembros de pleno derecho: Organismos nacionales de normalización con derecho a voto en las decisiones técnicas y políticas de la ISO. Son responsables de la venta y aplicación de las normas ISO en sus países.
- Miembros corresponsales: Observan el desarrollo de las normas y la estrategia de la ISO participando en reuniones como observadores.
- Miembros suscriptores: Se mantienen al día sobre el trabajo de la ISO, pero no participan en la toma de decisiones. No venden ni aplican las normas ISO a nivel nacional.
Los beneficios de aplicar las normas ISO varían según el tipo de organización:
- Industria: Mayor competitividad, acceso a nuevos mercados, aumento de beneficios, reducción de costes y acceso a las mejores prácticas a nivel mundial.
- Administraciones públicas: Armonización de regulaciones, fomento del comercio internacional, mayor confianza en la cadena de suministro global y especialización de los países.
- Sociedad: Mayor oferta de productos y servicios seguros y fiables a precios competitivos; mejores prácticas y coordinación para abordar desafíos globales como el cambio climático y el desarrollo sostenible.
ISO es la única organización que lleva el nombre ‘ISO’ debido a:
- Su red global con miembros en casi todos los países del mundo (165 miembros).
- El reconocimiento mundial de su marca.
- La publicación de normas que cubren diversas necesidades globales (23897 normas).
- Su principio de trabajo basado en el consenso, colaborando con más de 700 organizaciones y 100.000 expertos en todos los campos.
La ISO colabora con otras organizaciones de normalización como la Comisión Electrotécnica Internacional (IEC), la Unión Internacional de Telecomunicaciones (ITU) y es socio estratégico de la Organización Mundial del Comercio (OMC) para promover un comercio libre y justo.
Las normas ISO son reglas estandarizadas internacionalmente, reconocidas y con validez global. Ayudan a las organizaciones a operar de forma sostenible y a crear capacidades que aumentan el valor empresarial en todos los ámbitos de la producción, el comercio y los servicios. Al aplicar las normas ISO, se garantiza que la calidad del producto cumple con los requisitos del usuario. En otras palabras, las normas ISO actúan como un punto de referencia común para las empresas de todo el mundo.
Algunas de las normas ISO más comunes:
- ISO 9000 – Sistemas de gestión de la calidad
- ISO 45001 – Sistemas de gestión de la seguridad y salud en el trabajo
- ISO 14000 – Sistemas de gestión ambiental
- ISO 22000 – Sistemas de gestión de la inocuidad de los alimentos
- ISO 13485 – Sistemas de gestión de la calidad de dispositivos médicos
- ISO 27001 – Sistemas de gestión de la seguridad de la información
- ISO 26000 – Responsabilidad social
- ISO 50001 – Sistemas de gestión de la energía
También existen: ISO 56000 – Sistemas de gestión de la innovación; ISO 31000 – Gestión del riesgo;…
Nota: La aplicación de las normas ISO es voluntaria, no obligatoria. Las empresas las adoptan para aumentar la productividad y mejorar sus sistemas de gestión de la calidad. Sin embargo, si los clientes o socios lo exigen, la empresa debe cumplir con las normas ISO para satisfacer sus requisitos y mantener la colaboración. La aplicación de las normas ISO también es una forma eficaz de conectar y colaborar con empresas extranjeras.