La deficiencia de nutrientes puede causar mareos. Entonces, ¿qué deficiencias nutricionales pueden provocar mareos? Exploremos las causas y cómo abordarlas eficazmente.
Los mareos ocurren cuando se ve afectada la función del equilibrio en el sistema nervioso, causando una sensación de rotación o de que los objetos a su alrededor giran. Hay dos tipos principales de mareos: mareos centrales y mareos periféricos. Los mareos periféricos suelen deberse a trastornos del oído interno, desplazamiento de otolitos, o daño en el oído debido a una cirugía. Los mareos centrales provienen de problemas en el cerebro (tronco encefálico o cerebelo), incluyendo enfermedades vasculares, degeneración cerebelosa, isquemia cerebral transitoria, tumores cerebrales, accidentes cerebrovasculares y hemorragia cerebelosa.
Además, otros factores pueden causar mareos, como el embarazo, la anemia, el estrés excesivo, los efectos secundarios de los medicamentos, la presión arterial baja y la deficiencia de vitaminas o nutrientes esenciales.
Además de las causas médicas, la deficiencia de nutrientes en la dieta diaria también puede provocar aturdimiento y mareos. Entonces, ¿qué deficiencias nutricionales causan mareos? La falta de las siguientes vitaminas y minerales puede causar mareos:
1. Deficiencia de vitamina D:
La vitamina D ayuda a mantener niveles estables de calcio en la sangre. La hipocalcemia es una causa común de mareos. Varios estudios muestran que las personas con vértigo posicional paroxístico benigno a menudo tienen niveles séricos promedio bajos de vitamina D. Por lo tanto, la deficiencia de vitamina D puede ser una de las causas que desencadenan los síntomas de mareo.
2. Deficiencia de vitamina C:
El cuerpo humano no puede producir vitamina C por sí solo. Por lo tanto, si la dieta no proporciona suficiente vitamina C, el cuerpo puede tener una deficiencia. La vitamina C optimiza la absorción de hierro (un mineral esencial para la producción de glóbulos rojos). La deficiencia de vitamina C puede causar anemia por deficiencia de hierro, lo que lleva a síntomas de mareos frecuentes.
3. Deficiencia de magnesio:
El magnesio es un mineral esencial que ayuda al cuerpo a equilibrar los electrolitos. La ingesta insuficiente de magnesio puede interferir con las señales del oído interno y la función de los nervios sensoriales, causando pérdida del equilibrio y mareos.
4. Deficiencia de hierro:
El hierro es un mineral importante involucrado en la formación de células sanguíneas (glóbulos rojos). La deficiencia de hierro es una causa común de anemia, en la cual las personas a menudo experimentan problemas como visión borrosa, mareos y aturdimiento.
5. Deficiencia de vitaminas del grupo B:
La deficiencia de vitaminas del grupo B también puede causar mareos. Las vitaminas del grupo B juegan un papel importante en la optimización del metabolismo en el sistema nervioso al ayudar a formar la capa de mielina que recubre y protege los nervios. Cuando no se proporciona suficiente vitamina B12, la formación de células sanguíneas en la médula ósea puede verse afectada. La deficiencia de vitamina B12 puede causar anemia y desencadenar síntomas como fatiga, dolor de cabeza y mareos.
Para mejorar los mareos causados por deficiencias nutricionales, se deben incorporar los nutrientes mencionados anteriormente a través de la dieta diaria. Aquí hay algunas sugerencias de grupos de alimentos ricos en vitamina D, vitamina C, hierro y vitamina B que deben incluirse en la dieta:
Vitamina D: Aceite de hígado de bacalao, camarones, queso, salmón, ostras, leche, yemas de huevo, avena, cereales, champiñones.
Vitamina C: Guayaba, bayas (fresas, frambuesas, arándanos), pimientos, zanahorias, frutas cítricas, brócoli, tomates, lechuga, piña.
Magnesio: Frutos secos (almendras, nueces, semillas de girasol), vegetales de hojas verdes (espinacas, col rizada, hojas de remolacha), legumbres (frijoles negros, lentejas), granos integrales (avena, arroz integral, cebada), chocolate negro, aguacates.
Alimentos ricos en hierro: Hígado animal, aves y carnes rojas, mariscos (hierro hemo); frutos secos, legumbres, semillas, patatas, espinacas (hierro no hemo). Se recomienda consumir alimentos ricos en vitamina C y hierro simultáneamente para ayudar al cuerpo a absorber el hierro de manera más eficiente.
Vitaminas del grupo B: Vísceras, leche, huevos, carne de res, pollo, cerdo, salmón, legumbres, yogur.
Además de complementar con alimentos, también se debe limitar el consumo de alimentos que pueden desencadenar o empeorar los mareos: alimentos con alto contenido de sal, alimentos con alto contenido de azúcar, alimentos fermentados, alimentos que contienen estimulantes (cafeína, alcohol).
Los mareos pueden ser causados por muchas razones, incluyendo deficiencias nutricionales, estrés excesivo, mala calidad del sueño, enfermedades neurológicas como tumores cerebrales, isquemia cerebral transitoria, hemorragia cerebral y accidentes cerebrovasculares. Si experimenta mareos frecuentes, debe buscar atención médica de inmediato para recibir tratamiento oportuno y evitar complicaciones peligrosas. Se recomienda consultar y tratar los mareos en centros médicos de renombre con especialidades en neurología y nutrición.