Bittrex fue una popular plataforma de intercambio de criptomonedas estadounidense, fundada en 2014 por Bittrex, Inc. Con sede en Seattle, Washington, fue desarrollada por exempleados de Microsoft y Amazon. Bittrex permitía a los usuarios comprar y vender una variedad de criptomonedas directamente en su plataforma de alta seguridad. Su sistema API facilitaba transacciones rápidas y convenientes.
Bittrex se destacó como una plataforma líder en el intercambio de criptomonedas, conocida por su seguridad y la diversidad de criptomonedas que cotizaban en ella.
Sin embargo, el 30 de abril de 2023, Bittrex anunció el cese de sus operaciones en Estados Unidos. Esta decisión se tomó después de que la empresa se declarara en bancarrota. La quiebra de Bittrex no afectó las operaciones de Bittrex Global, con sede en Liechtenstein, que atiende a clientes internacionales fuera de Estados Unidos.
Según la solicitud de quiebra, los activos y pasivos de Bittrex se estiman entre 500 millones y 1.000 millones de dólares. En el momento del cierre, Bittrex todavía mantenía algunos activos digitales de clientes estadounidenses que no habían retirado sus fondos antes del 30 de abril. Bittrex afirmó que estos activos estaban «seguros y protegidos» y esperaba solicitar al tribunal la autorización para reabrir un número limitado de cuentas para reembolsar a los clientes.
Una de las causas de la quiebra de Bittrex fue la demanda interpuesta por la Comisión de Bolsa y Valores de Estados Unidos (SEC) el 17 de abril de 2023. La SEC acusó a Bittrex de operar una bolsa de valores, un corredor y una agencia de compensación nacionales no registrados. El ex director ejecutivo, William Shihara, fue acusado de conspirar con emisores para realizar acciones fraudulentas y evitar la supervisión regulatoria. Bittrex negó las acusaciones de la SEC, afirmando que los activos de criptomonedas en su plataforma no eran valores ni contratos de inversión.
Antes de la quiebra, Bittrex tuvo que pagar una multa de 29 millones de dólares al Departamento del Tesoro de Estados Unidos por «violaciones flagrantes» de las sanciones contra ciertos países y las leyes contra el lavado de dinero. La Oficina de Control de Activos Extranjeros del Departamento del Tesoro es el mayor acreedor no garantizado de Bittrex, con una deuda de más de 24 millones de dólares. Otros acreedores importantes de Bittrex son principalmente clientes de la plataforma.
Aproximadamente 16 clientes habían invertido al menos un millón de dólares en cuentas de Bittrex sin estar a su nombre. Entre ellos, un cliente invirtió en criptomonedas con activos por valor de 14,6 millones de dólares. La quiebra de Bittrex es una muestra del cambio en la regulación y la mayor supervisión legislativa sobre la industria de las criptomonedas en Estados Unidos. Muchas empresas del sector se han enfrentado a acusaciones de infracciones y multas, lo que ha provocado quiebras o la depreciación de activos. Bittrex es el último nombre en declararse en bancarrota, después de FTX y una serie de otras plataformas de préstamos conocidas como Celsius, Voyager y BlockFi.