Los Pensadores (INTP) se enorgullecen de su perspectiva única y su agudo ingenio. No pueden dejar de desentrañar los misterios del universo, lo que podría explicar por qué algunos de los filósofos y científicos más influyentes de todos los tiempos han sido Pensadores. Este tipo de personalidad es bastante raro, pero con su creatividad e inventiva, los Pensadores no dudan en destacar entre la multitud.
Una vida llena de pensamientos
Los Pensadores suelen estar absortos en sus propios pensamientos, y esto no es necesariamente algo malo. Las personas con esta personalidad casi nunca dejan de pensar. Desde el momento en que se despiertan, sus mentes están llenas de ideas, preguntas y observaciones. A veces, incluso pueden entablar debates mentales consigo mismos. Llenos de imaginación y curiosidad, los Pensadores pueden encontrar alegría y satisfacción en sus propios procesos mentales.
Desde fuera, puede parecer que los INTP viven en un sueño perpetuo. Son conocidos por ser pensativos, reservados y un poco torpes. Esto suele ser cierto, hasta que concentran toda su energía mental en un momento o persona determinados, lo que puede resultar abrumador. Pero independientemente de lo que estén haciendo o dónde se encuentren, los Pensadores son introvertidos y tienden a agotarse con las interacciones sociales a gran escala. Después de un largo día, anhelan tiempo a solas para poder profundizar en sus pensamientos.
Pero sería un error pensar que los Pensadores son antisociales o rígidos. Cuando conectan con personas que comparten su energía mental, las personas con este tipo de personalidad tienden a «brillar», y sus mentes «saltan» de un pensamiento a otro. Pocas cosas energizan más a un INTP que la oportunidad de intercambiar ideas o disfrutar de un animado debate con otra mente curiosa.
Los Pensadores y los fundamentos
A los Pensadores les encanta analizar patrones. No está claro cómo lo hacen, pero las personas con este tipo de personalidad suelen ser brillantes a la hora de detectar discrepancias y anomalías, como Sherlock Holmes. En otras palabras, es mejor no intentar engañarlos.
Curiosamente, las palabras de un Pensador no siempre son fiables. No es que sean deshonestos, pero con sus mentes tan activas y llenas de ideas y teorías, los INTP a menudo comparten cosas que no han pensado del todo. Pueden cambiar de opinión sobre cualquier cosa, desde los planes del fin de semana hasta un principio moral fundamental, sin darse cuenta de que parecían haber tomado una decisión en primer lugar. Además, a menudo disfrutan interpretando el papel de «abogado del diablo» simplemente para mantener una discusión interesante. Para un Pensador, las conversaciones más atractivas son como sesiones de lluvia de ideas, llenas de posibilidades únicas y pensamientos innovadores.
Los INTP pueden pasar días enteros deleitándose con ideas y posibilidades, y a menudo lo hacen. Sin embargo, en realidad, la puesta en práctica de esas ideas no siempre les interesa. Afortunadamente, cuando se trata de analizar a fondo un problema complejo y multifacético y encontrar una solución innovadora, pocos tipos de personalidad pueden igualar su potencial y brillantez creativa.
Los misterios del universo
Las personas con este tipo de personalidad suelen querer entender todo lo que hay en el universo, pero hay un área en particular que tiende a desconcertarlos: la naturaleza humana. Como su nombre indica, los Pensadores se sienten más cómodos hablando de lógica. Como resultado, pueden sentirse confundidos por la influencia a menudo ilógica que las emociones y los sentimientos tienen en el comportamiento de las personas, incluido el suyo propio.
Esto no significa que los INTP sean insensibles. En general, las personas con este tipo de personalidad quieren ser un apoyo para sus amigos y seres queridos, aunque no estén seguros de cómo hacerlo. Y como no pueden determinar la mejor y más eficaz manera de ofrecer ayuda, a menudo dudan o incluso se quedan callados. Esta «parálisis por análisis» puede afectar a muchas áreas de la vida de un INTP. Las personas con este tipo de personalidad pueden incluso pensar demasiado en las decisiones más pequeñas. Esto puede hacer que se sientan ineficaces, impotentes y tan abrumados por la multitud de pensamientos en sus cabezas que luchan por hacer las cosas.
La buena noticia es que los Pensadores no suelen quedarse atascados en sus pensamientos para siempre. Con sus puntos fuertes únicos, todo lo que necesitan, las personas con este tipo de personalidad pueden salir de la rutina en la que a veces caen. Al aprovechar su creatividad innata y su mentalidad abierta, los Pensadores pueden alcanzar todo su potencial, tanto como pensadores como individuos felices y completos.