El bazo-estómago es un concepto fundamental en la medicina tradicional china (MTC) que se refiere a la función conjunta del bazo y el estómago en la digestión y la absorción de nutrientes. Ambos órganos trabajan en estrecha colaboración para transformar los alimentos en energía y nutrir el cuerpo. ¿Pero qué es exactamente el bazo-estómago y cómo funciona?
Según la MTC, el bazo se sitúa a la izquierda del estómago y es responsable de la absorción y el transporte de nutrientes por todo el cuerpo. El estómago, un órgano hueco, se encuentra conectado al esófago por arriba y al intestino delgado por abajo. Los alimentos, tras pasar por el esófago, llegan al estómago donde son descompuestos por los jugos gástricos.
El bazo y el estómago, aunque son órganos distintos, mantienen una estrecha relación en el proceso digestivo. Un bazo-estómago saludable permite una absorción óptima de nutrientes, una buena circulación de la energía vital (Qi) y la sangre, garantizando la salud y la energía para las actividades diarias. Por el contrario, un bazo-estómago débil afecta la digestión, provocando síntomas como hinchazón, indigestión, falta de apetito y fatiga.
Existen diversas patologías relacionadas con el bazo-estómago en la MTC, como la deficiencia de Qi de bazo, la deficiencia de Yang de bazo, el frío-humedad en el bazo, el calor-humedad en el bazo, la deficiencia de bazo por parásitos, el frío en el estómago, el calor en el estómago, la acumulación de alimentos en el estómago y la deficiencia de estómago. Cada patología presenta síntomas específicos. Por ejemplo, la deficiencia de Qi de bazo se manifiesta con debilidad muscular, extremidades débiles, mala digestión y heces blandas. El calor en el estómago se caracteriza por la preferencia por bebidas frías, ardor en la parte superior del abdomen, sed y mal aliento.
Reconocer las señales de un bazo-estómago debilitado es crucial para una intervención temprana. Algunos síntomas comunes incluyen: labios secos y agrietados, lengua con capa blanca o amarilla, mal aliento, falta de apetito, fatiga, hinchazón y indigestión. Observar los labios, la nariz, los ojos y las orejas también puede ayudar a identificar el estado del bazo-estómago.
Ante cualquier síntoma inusual, es fundamental consultar con un especialista en MTC para un diagnóstico preciso y un tratamiento oportuno. El tratamiento del bazo-estómago se basa en la causa y la condición específica de cada paciente.
