Una tarjeta de débito es un tipo de tarjeta de pago emitida por un banco que se utiliza para realizar transacciones como retirar efectivo en cajeros automáticos, pagar compras en supermercados, tiendas y restaurantes a través de terminales POS, pagar facturas en línea y transferir dinero en cajeros automáticos o aplicaciones bancarias.
La tarjeta de débito está vinculada a una cuenta bancaria. Para usarla, necesitas depositar dinero en tu cuenta. A diferencia de una tarjeta de crédito, que te permite «pedir prestado» dinero del banco, con una tarjeta de débito solo puedes gastar el dinero que tienes disponible. Los requisitos para abrir una tarjeta de débito en los bancos son bastante sencillos. Solo necesitas ser ciudadano vietnamita o extranjero residente en Vietnam, y ser mayor de 18 años. Para obtener una tarjeta de débito, solo necesitas llevar tu documento de identidad/pasaporte al banco y un agente te ayudará con el proceso de solicitud. Al abrir una tarjeta de débito, el banco cobrará una tarifa de apertura, así como tarifas por transacciones como transferencias y retiros de efectivo. También se aplican tarifas relacionadas con el funcionamiento de la tarjeta, como la tarifa anual y las tarifas por el uso de la banca por SMS o Internet.
Existen dos tipos principales de tarjetas de débito: tarjetas de débito nacionales y tarjetas de débito internacionales. Las tarjetas de débito nacionales se pueden usar dentro del país y generalmente son gratuitas. En Vietnam, las tarjetas de débito nacionales también se conocen como tarjetas Napas. Las tarjetas de débito internacionales se pueden usar en todo el mundo. Al usar una tarjeta de débito internacional, tendrás que pagar ciertas tarifas, como una tarifa anual para mantener la tarjeta. Las tarjetas de débito internacionales más comunes son: MasterCard Debit, Visa Debit, JCB Debit, etc.
Las tarjetas de débito tienen múltiples funciones, como consultar el saldo, retirar efectivo, transferir dinero y realizar pagos. La función de consulta de saldo te permite verificar tu saldo disponible, las transacciones recientes y el historial de transacciones. Puedes retirar efectivo de tu cuenta a través de un cajero automático o en ventanilla. El importe retirado se deducirá directamente del saldo de tu cuenta. Puedes transferir dinero de tu cuenta a otra cuenta bancaria a través del sitio web o la aplicación del banco. Las tarjetas de débito también se utilizan para pagar bienes y servicios en tiendas, restaurantes y sitios web de compras en línea.
En comparación con el uso de efectivo, las tarjetas de débito ofrecen muchas ventajas: son más convenientes para realizar transacciones, más seguras ya que no necesitas llevar mucho efectivo contigo, facilitan el seguimiento y la gestión de tus finanzas personales, son útiles para compras en línea y ofrecen flexibilidad de pago en muchos lugares. Además, el dinero en tu cuenta de débito puede generar intereses.
Una tarjeta de crédito es un tipo de tarjeta que permite a los clientes gastar por adelantado dentro de un límite de crédito asignado y pagar el saldo cuando reciben el extracto mensual del banco. Por lo general, el titular de la tarjeta tendrá entre 45 y 55 días sin intereses para los gastos y compras realizadas con la tarjeta de crédito. Las tarjetas de débito y crédito tienen en común que son tarjetas de pago emitidas por un banco, se utilizan para retirar efectivo y realizar pagos de forma generalizada, y están protegidas por un PIN. Sin embargo, la fuente de los fondos, la gestión del dinero, las tasas de interés, las tarifas mensuales, los límites de la tarjeta y la calificación crediticia son las principales diferencias entre estos dos tipos de tarjetas.
La elección entre una tarjeta de débito y una de crédito depende de las necesidades de cada persona. Si deseas controlar tus gastos y solo usar el dinero que tienes disponible en tu cuenta, la tarjeta de débito es la opción adecuada. Si necesitas un límite de crédito para gastar por adelantado, pagar después y aprovechar las ofertas, la tarjeta de crédito es la mejor opción. Independientemente del tipo de tarjeta que utilices, la gestión de tus finanzas personales y el seguimiento de tus gastos son muy importantes.